El agua desmineralizada, es el agua a la cual se le quitan los minerales y las sales. Se utiliza cuando se requiere agua sin sal o baja conductividad.
Algunos ejemplos de su uso son:
Agua de alimentación de la calderas.
Usos farmacéuticos.
Industria de la electrónica.
Usos alimenticios.
Usos industriales.
Usos farmacéuticos.
Industria de la electrónica.
Usos alimenticios.
Usos industriales.
Para cada uso se utiliza una conductividad específica. Sin embargo siempre seguirá habiendo una cierta conductividad, debido al equilibrio ácido/básico del agua. El agua desmineralizada de mejor calidad tiene una conductividad menor a un microsiemens.
El agua desmineralizada se puede producir vía intercambio iónico con resinas catiónicas y aniónicas. Las resinas necesitan ser regeneradas con un ácido o una sustancia cáustica. Para reducir el coste de la regeneración de grandes sistemas de agua desmineralizada se pretrata el agua con una unidad de ósmosis inversa, que reduce el contenido de sales totales en más del 90% y reduce así el coste que produce la regeneración.
A continuación de los intercambiadores catiónicos y aniónicos se pueden utilizar los intercambiadores de cama mixta para reducir la conductividad aún más. En algunos casos la ósmosis inversa es suficiente (retiro de la sal de hasta 99.8%).
A continuación de los intercambiadores catiónicos y aniónicos se pueden utilizar los intercambiadores de cama mixta para reducir la conductividad aún más. En algunos casos la ósmosis inversa es suficiente (retiro de la sal de hasta 99.8%).
Los usos comunes para el agua desmineralizada son el uso como agua ultra pura, que tiene incluso mayores estándares de contaminación. En el resto de los casos los contaminantes orgánicos se quitan junto con todos los componentes biológicos. Las mejores calidades de agua ultra pura se utilizan en la industria de los microchips y en la industria farmacéutica.
La purificación del agua se aplica a aguas no aptas para el consumo humano, las cuales a veces sufren procesos para matar microorganismos y extraer partículas y metales que puedan ser dañinos al organismo y transformarlas en agua potable. El agua desmineralizada, al estar libre de estos compuestos, no requiere de purificación.
En la potabilización se utiliza a menudo una muy pequeña cantidad de cloro que no es perjudicial para la salud de una persona. Su ingesta es considerada médicamente inadecuada, excepto como recurso para la purificación y evitar males peores.
Agua Wesser le ofrece agua desmineralizada con grado farmacéutico para uso en:
Industria farmacéutica
Odontología
Veterinaria y Medicina
Laboratorios clínicos y más